Dormitorio de los chicos

*había escuchado ruidos pero no me había espertado aún, muevo un poco los ojos abriendolos poco a poco dejandolos entre abiertos; giré la cabeza y ví a Anko dormido, sonrío y veo que sus heridas estaban ya curadas del todo y las quemaduras tambien*

-Anko...precioso

*dije bajito al darme cuenta de que Nero y Lara estaban dormidos, me senté de cara a Anko y le acaicié el lomo suavemente*

*miré a Nero siguiendo acariciando el lom de Anko, aún no le hablaba a penas pero eso no me importó lo más mínimo*

-¿Tuviste una mini pesadilla?

*enarcé una ceja sabiendo la respuesta de él. Sin pretenderlo, subió un poco más la temperatura a su alrededor*

*escuché lo que me dijo y esbocé una sonris de medio lado*

-No era mi intención asustarte Nero

*nunca le había llamado "hermano" ya que me resultaba un poco empalagoso decirlo delante de él, le miro intensamente y sin prpadear*

*suspiré cargado*

-Mejor

*le dije y sin quererlo lanzé una honda de calor rozando a Nero para desahogarme y estar menos cargado*

-Gomen

*le dje pero me sentía mas liviano*

-¿Pasa algo?

*le pregunté sin dejar de mirarle y sin dejar e acariciar a Anko mientras que Lune nos observaba desde las alturas*

*negé con la cabeza*

-Piensas demasiado

*le dije y me acerqué a él, le dí un masaje con un poco de calor*

-No pienses demasiado que haber si te saldrá humo de la sesera

*el calor era suave mientras le masajeaba toda la espalda y apliqué el calor en toda su columna vertebral*

-¿Se siente bien?

*lo ví que se había dormido y me dormí también encima de él dando a ver una escena tierna*